El cuidado de su salud es una prioridad a cualquier edad, pero para los jubilados se convierte en una preocupación urgente. Obviamente, siguiendo el consejo de su médico, tomar sus medicamentos, comer bien y hacer ejercicio regularmente puede ayudarle a mantenerse saludable. Hay una cosa más que todo el mundo debe hacer, sobre todo a medida envejecemos y nos volvemos propensos a la soledad, la depresión o enfermedades crónicas.
Los investigadores han estado investigando el poderoso vínculo entre el estado de su mente y el estado de su salud física, y lo que han encontrado puede sorprenderle.
Los científicos han llevado a cabo varios estudios sobre las condiciones crónicas, que van desde la presión arterial alta y azúcar en la sangre, el cáncer de mama y enfermedades del corazón. Un estudio particularmente iluminador investigó incluso las tasas de supervivencia a largo plazo de los pacientes con VIH. Y en cada estudio, una perspectiva positiva (es decir, un estado mental saludable) se correlacionó positivamente con la reducción de los síntomas, mejor salud física general e incluso mayores tasas de supervivencia en aquellos con enfermedades graves.
Además, numerosos sobrevivientes de cáncer aseguran que su estado mental les ayudo a sobrellevar los tratamientos incómodos y ayudarlos a alcanzar la remisión.
Se ha puesto de manifiesto que una mentalidad positiva influye en la salud física. Sentimientos como la esperanza, la alegría y la gratitud parecen impulsar el sistema inmunológico y reducir los síntomas negativos.
Entonces, ¿cómo puede mantener una mentalidad saludable? A menudo puede ser un reto, especialmente cuando usted está sufriendo de una enfermedad incómoda o condición crónica. Los investigadores han utilizado las siguientes estrategias en sus estudios. La buena noticia es que son cosas simples que puede empezar a hacer hoy!
- Inicie un diario y anote una cosa positiva de cada día
- De la misma manera, grabe una cosa por la cual está agradecido cada día
- Comprométase a un acto cotidiano de bondad, ya sea una buena acción o simplemente unas cuantas palabras agradables a otra persona
- Cambie su enfoque al presente, y practique dejando de lado las preocupaciones sobre el futuro
- Enumere sus fortalezas y recuerde cómo las ha utilizado para hacer frente a situaciones difíciles
- Cuando se enfrenta a una situación estresante, siéntese y haga una lista de maneras de responder positivamente
Todavía no sabemos exactamente cómo funciona. ¿Los sentimientos positivos liberan sustancias químicas en el cerebro, que a su vez estimulan el sistema inmunológico? ¿O simplemente lo hacen sentir enérgico y esperanzado, para que pueda manejar mejor sus síntomas y cuidar su salud? Los investigadores están seguros de averiguarlo pronto. Pero por ahora, sólo sabemos que funciona. Así que trate los ejercicios mencionados y recuerde que el cuidado de su salud emocional también aumentará su bienestar físico.